jueves, marzo 30, 2006

Lista de chequeo para el manejo de la externalización de los problemas en la terapia de pareja

Jorge Ayala Salinas


1. Decidir que externalizar

a. En esta etapa lo importante es llegar a un acuerdo de y con la pareja, intentando jerarquizar uno de los problemas o el problema que esta generando el conflicto involucrando la relación y la vida personal, priorizando lo más relevante y de mayor importancia no para el terapeuta sino para la pareja:

Terapeuta: Y bien, ¿podríamos decir que aquello es lo que mas les afecta? ¿Lo que les tiene más preocupados y ocasiona mayores problemas? (…) ¿Es esto lo que tiene mayor efecto en la vida del problema? (…) ¿Podríamos empezar a trabajar con esto?

b. La pareja tiene que aceptar mutuamente cual será el problema a abordar prioritariamente:

Terapeuta: ¿Están los dos de acuerdo en que este debería ser el problema a tratar primero, el más importante y de efectos conflictivos?

c. Hay que tener en cuenta que aquello que vamos a externalizar tiene que ofrecernos salidas adecuadas para la solución del problema, de modo que brinde inmediatamente optimismo y apoyo en la pareja y podamos separar el problema de sus personalidades.

d. Lo que vamos a externalizar serán aspectos muy concretos en la vida y el conflicto: circunstancias y acciones:

Terapeuta: ¿De modo que esto sucede cada vez que llegas del trabajo y no encuentras a Maria?

Pablo: Si, y cada vez que ella tiene que salir de casa sola y con sus amigas y yo me quedo en casa o llega tarde.

e. Hay que tener en cuenta que el proceso de la externalización es variable ya que su encuadre no es estático, continuamente esta re-elaborándose según lo que propongan con el tiempo la pareja y las soluciones y dificultades en el camino.

f. Si la pareja en su relato ya está externalizando el problema, debemos apoyar tratando de clarificar definiendo o re-definiéndolo si es necesario para centrar el foco en este problema.

g. Debemos brindar una adecuada definición del problema para ambos miembros, esto facilitara el acuerdo terapéutico.

h. Lo externalizado tendrá que construir desde el inicio un espacio entre la pareja y el conflicto.
i. Lo que hay que dejar bien en claro es que no son las personas las que constituyen el problema. Es el problema lo que es el problema.


2. Nombrar lo externalizado


a. Para pasar a lo siguiente deberemos conocer ya al detalle el problema para poder elaborar el nombre adecuado:

Terapeuta: Bien, ahora que conozco muy bien el problema, se me ocurre lo siguiente: parece que este tuviera vida propia y se mueve para hacerles la vida imposible y generarles problemas, hasta se me ocurre que podríamos llamarlo de alguna manera, colocarle un nombre para hacerlo más sencillo y poder nombrarlo cada vez que sea necesario.

b. Este proceso va a permitir que se produzca un dialogo entre los miembros de la pareja:

Terapeuta: ¿Cómo lo llamarían ustedes?.... ¿Cómo llamarían ustedes a aquello que les interrumpe y molesta, a aquello que les origina el problema? (…) ¿Están de acuerdo los dos en esto? (…) ¿Podemos llamarlo así?

c. De no encontrar la pareja ellos mismos un nombre, podemos hacer uso de nuestra creatividad ayudando a encontrar el adecuado, brindando sugerencias:

Terapeuta: ¿un ataque de nervios?..... (la pareja: no, no es eso, es algo más) ¿la impotencia?.. (Pablo: tampoco es eso). ¿el ataque de celos?….. (Pareja: si, es lo correcto, es eso, parece ser eso) ¿Si?, bien, lo llamaremos el ataque de celos, estoy totalmente de acuerdo con ustedes.

d. Es este un paso muy importante en el desarrollo de la externalización. Aquella idea o concepto a externalizar, tendrá que ser algo creíble para la pareja. Tendrá que ser próximo a su experiencia y al problema mismo concretizado:

Terapeuta: Ahora que hemos llegado a esto, ¿estamos de acuerdo en que es el ataque de celos el que trata de apoderarse de las decisiones que toma Pablo ¿se dan cuenta?
e. Lo importante es que podamos convertir el problema en una “cosa” aparte de la personalidad de cada miembro de la pareja, en un agente externo al que debemos declarar la guerra:

Terapeuta:… Esto les debe generar mucho conflicto. Bien, ahora asumo que vamos a luchar juntos para vencer el ataque de celos que dificulta su relación y le genera problemas en su vida personal..
f. Para esto deberemos usar el mismo lenguaje de la pareja, evitando el uso del lenguaje técnico-profesional.


3. Crear distancia entre los clientes y lo externalizado

a. Ahora que hemos convertido ya el problema en una cuestión aparte, separada de la pareja y con vida propia e independiente a ellos (sin que esto involucre irresponsabilidad por ello), tenemos que indagar la influencia, sobre cual es el daño que el problema está ocasionando en la relación, en cada miembro de la pareja.

b. Tendremos que introducir preguntas que animen a la pareja a rastrear ellos mismos la influencia del problema en sus vidas y su relación:

Terapeuta: ¿Cómo es que el ataque de celos se ha interpuesto entre ustedes y ha dañado y perjudicado su relación?.... ¿De que forma les sigue afectando? ¿Quién de los dos se siente más afectado y dolido cuando irrumpe el ataque de celos? ¿Que influencias negativas ha tenido la irrupción del ataque de celos sobre la relación? (….) ¿Como se ha sentido cada uno de ustedes? (…) ¿En qué les ha afectado como pareja?

c. Hay que identificar los momentos en que aparece el problema:

Terapeuta: ¿Y en que momentos es que aparece el ataque de celos para molestarlos?
Pablo: Generalmente cada vez que llego del trabajo y no encuentro a María en casa.

Terapeuta: ¿Y que opinas tu María?

María: Si, es por lo general cuando yo no estoy en casa o cuando tengo que salir sin el o con algunas amigas para reunirnos.

Terapeuta: ¿Alguna otra ocasión?

María: Bueno, también cada vez que tenemos que salir juntos a alguna reunión o cada vez que llegamos a casa luego de una de ellas.

d. Hay que indagar la forma en que ellos enfrentan el problema y la influencia que cada uno tiene sobre el problema externalizado:

Terapeuta: ¿Y qué es lo que hace cada uno de ustedes? ¿Cómo reaccionan frente a la aparición del ataque de celos? ¿Cómo lo haces tu María? (….) ¿Y como lo haces tú Pablo?
f. Hay que darle especial énfasis a las ocasiones en las que ellos han logrado enfrentarse y vencer eficazmente el problema:

g. De esta manera podremos buscar momentos en los que el problema haya sido abordado, los haya vencido o hayan sabido enfrentarlo con buenas decisiones y acciones:

Terapeuta: Y cuando Pablo ha sido atacado por los celos ¿como has reaccionado tu María?

h. Revisar el efecto negativo que tiene el problema sobre las vidas y relaciones de la pareja:

Terapeuta: ¿Y que es lo que han dejado de hacer juntos o solos por culpa del ataque de celos?

María: Antes era común que salgamos los fines de semana a divertirnos, compartíamos momentos agradables con algunos amigos en reuniones. Cuando esto empezó a hacerse mas frecuente dejamos de salir.

Pablo: Si, y yo ahora tampoco tengo muchas ganas de salir y cuando María sale sola, discutimos más y todo es peor, ya no podemos ni manejarlo.
i. Hay que atribuirle a lo externalizado todo lo que sea negativo, incluyendo las quejas y malentendidos.

j. Hay que utilizar en todo momento expresiones personificadoras del problema, que le atribuyan una personalidad fuera de la pareja y sus miembros.

k. Para poder crear una distancia más definida, será útil usar la voz del problema externalizado, contraponiéndola a los deseos de la pareja, para poder marcar las diferencias entre ellos y el problema externalizado:

Pablo: Yo a veces pienso que he nacido así, que he heredado de familia estos celos y no podré cambiar nunca, que sacarle celos a ella es lo único que puedo hacer cuando no me siento seguro y no puedo más, ni siquiera conversar con ella tranquilamente y escucharla.

Terapeuta: El ataque de celos utiliza este tipo de engaños en todas las parejas a las que he visto afectadas, de modo que no creo que esta sea tu verdad, es solo la verdad del ataque de celos, es una expresión con la que quiere engañarte.

Pablo: Estoy seguro que si doctor, le pasa lo mismo a muchos familiares y amigos, siempre escucho lo mismo.

Terapeuta: ¿Te das cuenta? Sucede a menudo. Y, ¿como te has arreglado cada vez que el ataque de celos ha querido meterte esas ideas en la cabeza?

Pablo: Pues he pensado que lo mismo le ha dicho a mis amigos y arruinado su matrimonio.... yo no quiero caer en eso y terminar así, por eso trato de ser fuerte cada vez que pienso en los ataques de celos.

Terapeuta: Aja, entonces creo que lo estas haciendo muy bien Pablo, no estas permitiendo que la voz del ataque de celos logre vencerte y arruinar tu vida, es un gran paso para la terapia y sobretodo para su relación. Te felicito, has logrado distinguir tus deseos de los del ataque de celos.

l. En un método que podría resultar útil para separar y diferenciar las ideas y deseos personales de los de la voz del problema externalizado, podríamos pedirle a la pareja que en una columna apunten las ideas del problema y en otra junto a estas, las ideas propias de ellos mismos.

m. Desde el punto de vista del lenguaje seria conveniente usar expresiones que marquen explícitamente una pelea o lucha con el problema externalizado, de modo que la pareja sienta realmente que esta involucrada en una batalla seria con el problema a derrotar; esto resulta muy eficaz:

Terapeuta: Y una vez ahora, declarada la guerra al ataque de celos, ¿Qué podemos hacer?

n. Lo importante es construir un espacio entre la pareja, su personalidad, y el problema:

María: … y es que ya ni siquiera ya salimos a fiestas o reuniones los fines de semana, tampoco puedo salir sola.

Terapeuta: De modo que el ataque de celos esta tratando de interponerse y dañar incluso su vida social y de amigos.

4. Ayudar a asumir el control sobre el problema

a. En esta parte del proceso, una vez establecido el problema y externalizado, deberemos reconocer la forma en que ayudaremos a la pareja a recuperar el control sobre este.

b. Podemos empezar indagando sobre las distintas formas con las que han intentando solucionar el problema.

c. Hay que buscar junto a la pareja nuevos significados y definiciones sobre el problema externalizado y la influencia que tiene en sus vidas.

d. Hay que ver de que manera la interacción de la pareja o la influencia de uno de sus miembros alimenta el problema. Como ellos influyen sobre este:

Terapeuta: ¿Y que seria para ti, Pablo, lo que alimenta y hace posible la aparición del ataque de celos?

Pablo: Sucede que cada vez que siento curiosidad por saber lo que ella hizo, no le pregunto nada, me callo y empiezo a imaginar cosas y aparecen ahí los celos. Que alimentan los celos.

Pablo: Cada vez que he querido preguntarle algo al respecto nunca lo he hecho y eso alimenta los celos y las ganas de sentirme así.

María: Y yo me quedo callada por temor a que lo que yo diga le vaya a molestar, y le oculto ciertas cosas de las que luego se entera.

e. Hay que fijarnos en las acciones que no siguen el patrón habitual del problema y que efectos tiene en su vida y la relación.

f. Una vez que estas han sido identificadas, la pareja podrá asumir el control sobre cada una de estas acciones negándose a seguir con el mismo patrón, dándole mas batalla todo lo que alimenta el problema.

g. Hay que seguir manteniendo siempre la distancia con el problema externalizado, planteando nuevamente que es este con vida y voz propia la que invita a la pareja a comportarse de una determinada forma, provocándolos e incluso engañándolos.

h. Hay que elaborar preguntas que nos permitan conocer cuales son los momentos en los que el problema es una excepción, momentos que han sabido superar haciendo uso de sus propios recursos y cualidades, la forma como se han enfrentado al problema:

Terapeuta: ¿Y como se ha portado el ataque de celos durante la semana?

Pablo: Pues no ha aparecido desde esa fecha.

Terapeuta: Que buena noticia. ¿Fue fácil o difícil vencerlo?

Pablo: Bueno, en realidad, siguiendo las instrucciones y pensándolo bien, muy fácil.

María: Si, parece que todo se hubiese arreglado sencillamente.

Terapeuta: Que bueno que eso suceda. Y, ¿cómo has hecho Pablo para poder enfrentarlo con tanto éxito y buenos resultados? ¿Qué has hecho diferente?

Terapeuta: ¿Y como dirías tú Maria que Pablo esta venciendo el ataque de celos? (…..) Tu eres parte de esto, ¿de que forma has ayudado tú a que esto sea posible? ¿Qué has hecho diferente?

Terapeuta: ¿Qué cualidades personales han usado para vencer el ataque de celos? ¿En que se han apoyado para conseguir todo esto?

Terapeuta: ¿Cuál es la diferencia ahora?

i. Podemos hacer uso de preguntas presuposicionales para ver el efecto que estos resultados tendrán en el futuro:

Terapeuta: Y Pablo, ¿como crees que reaccionarias la próxima vez si te dejaras vencer por el ataque de celos?

Terapeuta: Y ¿como crees que reaccionaria Maria si el ataque de celos te tienta e intenta vencerte alguna vez? (…..) ¿Cómo reaccionaria tu María?

Terapeuta: Pablo y María, ¿que creen ustedes que sea el secreto para vencer al ataque de celos?

Terapeuta: Pablo, si uno de tus amigos o familiares te lo pregunta, ¿que le dirías, cual es el secreto para vencer tan bien al ataque de celos?

Terapeuta: ¿Que harías tu Maria si el ataque de celos vuelve a atacarlos y Pablo no puede solo? (…) ¿Estarían preparados para enfrentarlo y vencerlo nuevamente?

Terapeuta: Cual crees tu Maria que es la táctica que a Pablo le ha dado tan buenos resultados (…) de que manera tu le has servido de gran ayuda para enfrentar y vencer esta semana el ataque de celos?

j. Para cambiar y eliminar el problema hay que transformar los efectos que este ocasiona en la pareja. Al cambiar los efectos estaremos transformando el problema.

lunes, marzo 27, 2006

En nombre del padre
Jorge Ayala Salinas

Papá quiere al hijo, el hijo quiere al padre. Ambos quieren y no lo mismo.

Hay un vínculo que conecta biográficamente a Ollanta Humala con Vladimiro Montesinos. Es el vínculo familiar. Un proyecto. La relación con el padre y la familia. Un deseo perverso. El poder.

Trataremos de comprender en lo siguiente, la humanidad de Ollanta Humala. Establecer una aproximación (1). Un diálogo con la figura perversa de Vladimiro Montesinos (2).

La “novela familiar” de los Humala y los Montesinos, esta signada por una estructura que proviene de un régimen patriarcal que se extiende desde lo familiar a lo social posterior y ordenadamente.
En su época, la familia Montesinos perteneció al “patriarcado urbano arequipeño” (3). Estas familias pertenecían a una élite aprovechada y gozaban de un gran prestigio social. Eran una familia de excéntricos conocidos precisamente por “su locura” y su “fama de extraños”. El padre de Vladimiro, Francisco Montesinos fue el menor de catorce hermanos.

La tradición patriarca empieza a derrumbarse en un contexto arequipeño que empezaba a configurarse móvil distintamente, y los Montesinos bajaban tropezando vergonzosamente el escalón del segmento social al que inicialmente pertenecían. Con esto se derrumbaba la tradición y el poder. Cada miembro de la familia se abría y formaba su nueva familia. Francisco Montesinos no llega a ser un profesional y se casa con una muchacha de condición humilde. Vivían en la zona de servicio de lo que anteriormente había sido la casa de los Montesinos. Su situación fue considerada una vergüenza y un descaro para la familia. Vienen los hijos. Vladimiro es el mayor de los cinco y sobre él se deposita toda la confianza en el proyecto de recuperar lo perdido. Vladimiro tiene que ser militar y desde ahí llegar al poder y honrar a la familia. Todo lo más valioso para Vladimiro es aquello que no tiene. Aquello de lo que carece y no tiene ya su padre ni la familia: poder, éxito, dinero y posición social. Voluntad y principios. Vladimiro desprecia a su padre por proyectar sobre él su figura. Se siembran el rencor y el desprecio. El odio a su padre.

La carrera militar es larga y jamás le permitiría ver consolidado el proyecto. Una posición tensa y difícil se apodera de Vladimiro. Tendría que elegir un camino más corto para llegar al poder y satisfacer las ambiciones de su padre convertidas ya en su propia ambición. Una ambición perversa. Y comienza una carrera arribista de ascenso como asesor, incluyendo dentro de ella la adulación hacia los generales de rango mayor para consolidar con confianza lo que vendría después. De esta forma cumpliría con el encargo paterno. Con la voluntad del padre. En nombre del padre.


El poder deshecha los medios y se convierte en un fin. El uso del poder es perverso y la perversión consiste en desgarrar al otro, en suscitar a la vez su deseo y su culpa, en gozar con su sufrimiento (3). Y el resto es lo que conocemos.

Montesinos funda una ética de 4 aristas:

1. Engañar al otro se justifica según mis intereses.
2. La doble moral, emplear códigos para enjuiciar un mismo hecho, no es algo problemático ni cuestionable.
3. La ley debe estar subordinada al poder, al menos mientras yo la detento.
4. Yo me merezco todo y quien no lo reconoce puede ser destruido.

Una ética fundada en el camino de la servidumbre en vez del camino de la libertad. Ética que se justifica en el camino de “la reconstrucción nacional y moral”. Ética equivalente al discurso de Humala que no sabe sino desafiar, contestar las preguntas que sólo el considere correctas según sus intereses. Buscando otras respuestas. Desafiando al Poder Judicial. Tentando a la violencia. Reclamando la insurgencia. Conocemos el mecanismo usado por el comandante en Madre Mía. Su doble moral. Su (in)capacidad para articular un discurso. Para salir del paso. Sonriendo.

¿Por qué produce caos el discurso humalista? Porque es un pensamiento falso. Si fuese verdadero produciría orden. Son sus propias ideas la fuente del desorden. Desorden que lo confunde todo. Que produce el (auto)engaño e impide cualquier operación correcta. Y deshecha los medios. Y hace necesaria la corrupción.

Lo de Ollanta Humala lo (re)conocemos por las últimas declaraciones de su madre (5). Ha iniciado el relato. En Ollanta está depositado el proyecto de su padre, Isaac Humala. El sueño del golpe militar. El sueño del proyecto etnocacerista. La llegada al poder para transformar la democracia y convertirla en un proyecto totalitario y nacionalista. El relato de los Humala tiene puntos en común con el de Montesinos en la figura del padre y la forma del deseo.
Para el jerarca de los Humala, nunca hubo mejor manera de capitanear literalmente el estado, que desde un golpe militar. Por eso necesitaba que sus hijos se convirtieran en oficiales del ejército peruano. “Si uno fallaba, el otro podía tomar la posta”, repetía Isaac Humala en referencia al propósito que tenía destinado a sus hijos. Y el primero en fallar fue Ulises, el hijo mayor. Le tocaba el turno a Ollanta, que en algún momento sintió lo que el joven Vladimiro Montesinos: que su padre no tomaba en cuenta sus decisiones y se orientaba únicamente por sus necesidades y deseos personales, plasmadas sus ideas políticas en sus hijos. Ollanta sintió rechazo e incluso hubo discusiones con su padre que incluyeron la amenaza con irse de casa sino se respetaban sus decisiones y derechos. Ollanta dejó finalmente su carrera de Zootecnia en la Universidad Agraria convencido totalmente por su padre y la familia. Dato curioso: cuando Emilio Camacho (7), pregunta a Isaac Humala porque fue tan frío y distante con sus hijos, este responde: “El amor estaba ahí, pero el amor no se exhibe”.

Antauro y Ollanta recibieron como Vladimiro Montesinos, ayuda extra para mantenerse en la carrera militar. Su padre recurría constantemente a las viejas amistades para proteger a sus hijos de las vicisitudes de la vida castrense necesarias para llegar al poder y no declinar en el camino. Y todo vínculo en Ollanta es familiar; pocos saben que Nadine, su esposa, es también su tía. Ángel Heredia Palomino, padre de Nadine, es tío de Elena Tasso, la madre de Ollanta. Elena y Nadine son primas. Y Nadine aunque menor, es tía de Ollanta.

Isaac colaboró desde el primer momento con el proyecto actual de Ollanta Humala (que aunque niegue, tiene la base ideológica de su padre), convertido el Movimiento Nacionalista Peruano en el Partido Nacionalista Peruano. La herencia es total, aunque Ollanta insista su independencia y niegue similitudes y trate de mostrar diferencias con el discurso de su padre.

Esto es lo que dice su padre:

(21/01/06): "Ollanta, por la causa del Perú, hablaría hasta con el diablo".
"La carrera militar es una pista hacia el poder".

(02/02/06): “Lo que estamos viendo es que en el Perú, como una entonación, los nacionales tienen que ser los cobrizos andinos. El resto serán ciudadanos con derechos”.

(17/03/06): "Víctor Polay no es un delincuente común, es un delincuente político, y no hay razón para que continúe en prisión. No me he puesto en la cabeza de mi hijo Ollanta, que está más cerca de llegar al poder, pero yo, si fuera gobierno, lo amnistiaría (a Polay) y también a Guzmán, porque el senderismo ya no es peligro y está derrotado".


Esto es lo que dice su madre:

(21/01/06): "Yo les apuesto a ustedes que con dos violadores fusilados ya no habría más violaciones. Y con dos homosexuales que sean fusilados ya no habría en la calle tanta inmoralidad".

(21/01/06): "Lo que hará Ollanta, será llevar el nacionalismo que utilizó Velasco Alvarado".

Y lo que dice su hermano Antauro es desde luego, irreproducible.

Hoy, Ollanta Humala quiere ser presidente apelando a su ignorancia y a la ignorancia y las vísceras de un pueblo condicionado por la tragedia como único relato. Un pueblo que ha encontrado la gran figura mitológica. Un Narciso reinterpretado en función a sus problemas (6). Para cumplir el sueño de su padre. Esta vez no desde un golpe militar. Paradójicamente desde la democracia. Y con la complicidad de miles de peruanos para la (auto)destrucción. De esta forma cumplirá con el encargo paterno. Con la voluntad de su padre. En nombre del padre.

(1) Siguiendo la línea de Portocarrero: Comprender es aproximarse. Comprender no es justificar.
(2) Partiendo de la biografía de Luis Jochamowitz, Vladimiro (2002), y de las reflexiones de Gonzalo Portocarrero en Rostros criollos del mal. Cultura y trasgresión en la sociedad peruana (2004). Un libro de lectura obligada, uno de los mayores aportes a la tribu (de la sociología, la psicología y la antropología) de comienzos de siglo en el Perú, bajo un análisis encantadoramente contemporáneo.
(3) Como lo señala Víctor Andrés Belaúnde.
(4) José Luis Rosales.
(5) En audio difundido por La ventana indiscreta, cortesía del diario La Primera.
(6) Narciso o la estrategia del vacío. Lipovetsky.
(7) Autor de la biografía breve aparecida en el diario La República, Retratos de poder, del que he tomado algunos datos.